martes, 14 de abril de 2009

Se rumorea que tengo novia

Por casa se rumorea que tengo novia. El viejo ayer, echando un pito en la terraza, me dijo que le gustaría tener un nieto mío. Y a mí que tu lo veas.

En una fantasía sabiamente guiada por la maestra Ana, apareció ese nieto. Un churumbel de pelo fuerte y negro taurino, de ojos grandes, oscuros, profundos y luminosos, y de complexión seductoramente atlética y carne morena, volando una cometa a su bola en la playa. Y lloré al sentir que tú no estabas para verlo. Y que el padre entonces era yo, con tanto bueno tuyo dentro y con tu energía flotando desde el cielo y desde la mar. Sea como sea ese futuro, estaremos seguro juntos para sonreir al viento las tres generaciones. Aunque estoy convencido -sin visión ni fantasía- que mi primera descendencia será niña. Y este papi viejo estará más en forma que nunca y 20 años más joven para acompañar sus pasos.

Hoy volví al ritual de desayunar en "La amistad". Esa santa parroquia con sus parroquianos. El murciano desayunaba, más tarde le acompañó el asturiano, que decía que si dormía con Galega e iba a bar de Galegos era galego. Manolo replicó: "tú eres asturiano". María andaba en la panadería de la esquina. Vistazo al salibante mostrador.

- Medio de butifarra con queso manchego y rioja.

Manolo me deja como siempre las aceitunas y la botella de tinto en la mesa. Su rapaz, que al preguntarle por su examen de camión me dice que hoy empieza la primera práctica, me pregunta:

- ¿Estudiando?
- No, ya estudié demasiado..., esto es placer.

Al pedir después una tapa de tortilla de patatas con pà amb tomaquet, la pitusa de María me lanza:

- ¿Te has quedado con hambre hijo mío?
- Un poco María...
- ¿Estuviste en Galicia verdad?
- Sí, en Pontevedra...
- ¿Comerías bien verdad?
- Ya te digo...no lo sabes tu bien...por allá se sigue comiendo comida de verdad...
- Ya lo puedes decir ya...
- Me acordé de vosotros.
(y de vuestra Estrella Galicia)

Me sigue pareciendo milagroso que aún queden lugares como La amistad. Y escuchar los comentarios de mi sabio pueblo. No tienen desperdicio. Puro terreno. Y que bien se come, se bebe, se escucha y se lee.

Últimamente voy siempre acompañado por La sombra del viento que me tiene subyugado y adicto. Todos los libros tienen su historia. Una inscripción a boligrafo azul me recuerda que fue un regalo de cumpleaños en el 2004 de mis ex-suegros. Y que días después marchaba para Atenas. Antes pasó por el alma y los ojos del viejito y la viejita. Cuando me ven devorarlo me dicen: "¿te está gustando verdad?"...y me desaconsejan la segunda de Ruiz Zafón y me recomiendan La catedral del mar. La estoy paseando por el parque, la terraza, bares, playas y viajes varios. Leer al sol está al alcance de todos los bolsillos. Y por fortuna, como el tabaco...aún me queda. Ya lo dejaremos otro día. Me alegro que Madrid me vea fumándomelo.

Miré vuelos, trenes...pero no cambié mi decisión de irme con la nave plateada y a ritmo lento, sin peajes de ningún tipo y con semáforos y vida alrededor. Me encanta ponerme al mando de la nave, con mi música, sin prisas, mandando sonriente y cantando a grito pelao al volante. Dirección Malasaña.

Mañana visita a Ricardo, chistes verdes y Fermín Romero de Torres en la boca a ritmo de tijera... arreglar asuntos pendientes entre la lavadora, la secadora y la aburrida plancha, tenis al sol como marajás con el tete y comidita con el trío calavera.

Y muchas ganas de vivir. De primeras miradas y de muchos conocidos abrazos. Guns & Roses me gritan, como solo saben hacer ellos, wellcome to the jungle. Mi buena trova nunca estuvo reñida con el metal. Y la radio me devuelve a la morena mía de Juli con el niño Miguel. Y la Mari con su duende del sur. Yo vengo de un sur sin puntos cardinales.

Y no, sigo sin novia, aunque se me vea feliz. Quizás, solo quizás, alguna mujer que lee se alegre al saberlo. A mí cuando me gusta una bella y famosa y se que está soltera me hace albergar esperanzas. A esperanza y resignación no me gana nadie. Y como alguien que no recuerdo dijo: "tu autoestima es a prueba de bombas". Y eso, como todo, tiene sus cosas buenas y sus cosas malas.

A por Madrid, que está esperando ponerme rubias, abrazos, poemas, música, sonrisas y noches gatas, a este perro viejo con alma de aprendiz de gato. No se me ocurre mejor incasual momento para callejear tus calles, acompañado de viejos y nuevos amigos, de la mejor gente del mundo, y hasta de un sueño sin expectativa pero con unos ojos que dicen: "Cómeme".

Que bien suena Cómeme.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

que razón tienes,amigo!!!!!!!
que bien suena..........cómeme!!!!
a veces los rumores son infundados y a veces no, tengo que creerte, por supuesto................pero...........ojalá
sería cierto,no???????

un abrazo enormeeeeeeeeeeeeeee

Nares Montero dijo...

ÑAM!
Ya te siento cerquita jeje!
Mañana abrazo enorme!

María Jesús Siva dijo...

Oigo muchas voces Trovador, algunas me gustan mucho y otras no tanto. Leyendo este relato, en el que te vuelvo a sentir'desnudo', imaginaba diferentes paradas a la vez, como esa capacidad de desdoblamiento que poseen algunos y que nos dejan comiendo, a la vez que cogemos el coche o nos vamos a Galicia a tomar un Alvariño... Me gusta mucho la mezcla de imagenes alocada y sin ninguna estructura (aparentemente) que la sostenga, esa magia del surrealismo en el que todo cuadra al final del texto.
Algunos sueños se cumplen, pero igual no son como soñamos.

Beso grande.

Begoña Leonardo dijo...

Qué manera tan especial de ir desenlazando y enlazando al final para abrocharlo... Buenísimo relato.
Gracias y un besiño, que me parece que un beso gallego.

RR dijo...

Hola amigo!!

Largo post, nada aburrido y sí entretenido...como largo va a ser mi comentario ya que no puedo quedarme en un ..."me gusto tu relato...", demasiado escrito, demasiado contado, como para devolverte solo una frase, y ahí voy trovador a ver si no te aburro....

Hblas de AMISTAD, palabra que encierra muchos significados, que bueno sentir el calor de viejos amigos, con sus comentarios y xq no, con algún que otro abrazo.."que bien se come en la AMISTAD", seguro que es un lugar lleno de sabor y no sólo x lo que se come... si no x lo qu se escucha y se lee...mágica esa alquimia no?

Gran libro la sombra del viento, te recomiendo uno "Los hombres que no amaban a las mujeres", una pena que el autor no viera el fruto de su esfuerzo...

Como a ti, me gusta ir en mi coche, disfrutando de la lluvia y de mágicos atardeceres, sintiendo la vida cerca y simplemente sintiendo...y dejándome llevar...hice una entrada en mi blog que al leerte me la ha recordado, te invito a que la leas, cuando puedas y te apetezca, se titula TARDE DE FEBRERO...

Malasaña fue mi barrio durante años, años en los que el sol y la cerveza me acompañaban junto a mi gente...

Por cierto cuando te tomes esa cerveza con Isma, cuenta tb conmigo..no me olvides...

Que Madrid, mi ciudad, la que me vio nacer, te siga acompañando...y una pregunta ¿por qué rubias, no te has planteado que quizá pueda existir una mujer con otro color de pelo que te haga feliz y pueda comerte entre besos infinitos y abrazos entregados, sintiendo tu calor y tal vez tu inconfundible aroma?...

Quizá algún día nos tomemos una birra en Malasaña.

Un beso con duende

trovador errante dijo...

Adrí relinda...creemé...cuando tenga novia...tu serás de las primeras en enterarte...;-)

Te quiero mucho. Enorme.

Niña roja, ñami ñami...nosotros siempre estuvimos muy cerca. Mañana suena mejor que nunca.

Ada...me encanta tenerte por acá. Y tu visiones. Y desnudarme. Lo que detesto es la ropa. De todos los sueños, me quedo con la vida.

Bego, besiños y beijos sin bandera y con final feliz.

Rosa...deja que diga mi rosa, me tomaría esa rubia contigo en cualquier lugar. Lo importante no es el color, es el infinito de un beso y vivir mareado de abrazos. Y el duende. Soy fácil de localizar en tu Madrid, en la sala Galileo Galilei de jueves a sábado. Nunca digo que no a una rubia. Y casi nunca a un beso.

Os quiero a todos de bien cerquita