domingo, 30 de noviembre de 2008

Calla la noche

Un niño está cantando al viento
suena como un corazón
de garganta muda, emocionada

Palabras llenas sin código alguno
cierra los ojos y escucha...

a las alas que te llevan
sin moverte
a instalarte en la paz
de cigarro rubio
de vino tinto
multicolor la emoción
escoge atardecer o amanecer
tu playa o la mía
nuestros montes
viaja ligera dentro de mí
te siento

y vuelvo a cerrar los ojos...
otro sorbito de vino
me sabes dulce y fuerte
tu dulzura es muy poderosa

Sigue callada por favor
no te vayas de aquí
quédate un ratito más
que mañana dios dirá
y le diremos
que no toque nada
y no lo tocará

Sigue mirándome ahora
no necesito más
y por favor, sigue hablándo
solo para mi con tus pupilas
que la noche está cansada
y quiere dormir contigo.

30/11/2008
A la noche callada

sábado, 29 de noviembre de 2008

Que gran sábado

Hace segundos, estaba bailando en la cocina escuchando ¿que se puede hacer con el amor?, de mi primo cubano. Daba vueltas con los brazos abiertos al cielo -al techo-, mientras la crema de calabaza se calentaba en el microondas. Me sale la felicidad por todo el cuerpo, se escapa y se propaga.

Ayer me llevé el resto de lentejas con arroz - uno de mis platos favoritos - y el resto de la crema naranja, con estas palabras a la viejita:

- Me las llevo ¿vale?...que yo les doy salida.
- LLévatelas que las lentejas (que llevo 3 días comiendo) y la crema (por el queso) se pondrán malas.

Todo sea por hacerle un favor a mi linda madre...;-)

Me siento feliz hoy, y vuelvo a la prosa vil para escribirlo. Las cosas y sensaciones buenas hay que compartirlas, con más motivo si cabe, por aquello que me decía la maestra Ana de aumentar la cuota global de felicidad del mundo.

Sábado fácil, fluido, feliz, sencillo, agradable, caluroso por dentro pese a la bajada de temperaturas, la lluvia que siempre vuelve y los cleenex, el Ilvico y el gramo de paracetamol de ayer.

Abrí el Campo viejo, rioja barato y más que digno de mi particular celebración de la pequeña vida. Más tarde le doy a la crema.

Y lo mejor es que hoy no pasó nada especial...pasó mi vida, la que yo elegí, peleé en paz, y la que tengo. Si primo, amo la arcilla que hay en mis manos...

El jueves no pude quedar con la dulce María -la única mujer que no pone celosa al resto-, una gripe intestinal quebró su estomaguito, casi su baño por la noche; y nuestro encuentro. El próximo jueves será petita. Siguen el pie el Japo de Provença y la birra el Mediterráneo de Balmes.

Mañana tampoco quedaré con Pilar, esperaremos pacientes dos findes más. Es tan buena que su último ex - el abogado-, se dió una leche con la moto y le está cuidando. Hasta hoy no sabía ni que era ex ya. Hay ganas, morena de mis entretelas.

Mañana entonces tenis de 11 a una con el tete Lluís y comida en casa de los papis a cuatro bandas, sin mi hermanita, las nenas y Robert. Celebrarán con su familia su bienvenida a mi club, el de los 36. Mi cuñao fue al cole conmigo desde los 6 añines...y deben ir ya por los 17 años juntos. Que bueno.

Y vamos al hoy, a este rico sábado.

Amanecí muy bien, como siempre, tengo esa suerte. Y dos de mis pibes tenían partido en el pueblo de al lado, lujo. Los dos Joan, benjamines ambos, con su papás. Partido entretenido, perdimos bien..., ellos eran mayores y mejores...y las lágrimas de Joan, el más peque, después de perder 12-10 en el set definitivo. Más lindo...esos ojazos azules tan claros me pierden, es un nene encantador, como todos, pero a este le tengo un cariño especial. Y en unos años, le va a dar más de una alegría al club, seguro.

Del vecino pueblo a Begues, reencuentro de la más vieja cuadrilla, promovido por el gran Paquito y la gran Nuri. 17 adultos y 6 pibes, entre ellos las mías, mi hermana y Robert. Genial, agradable, divertido, un gustazo... le decía a Nuri que hay que repetir con una sabia cadencia máxima de 3 meses...

Me alegro por los Pacos, que estén ahí tan bien y que se hayan quitao, y estén currando para que otros se quiten. Ya conocí a muchos amigos que se quitaron de eso...y algunos otros que no, puta droga y mala vida. Todo un ejemplo de que si quieres, puedes.

Y con exceso de alegría y de vino tinto de navarra..., para el club a dirigir el partido del primer equipo. Que lindo atardecer de camino manejando la nave, - no dejo de mirar al cielo, siempre, buena costumbre-.

Partidón a priori y a posteriori. Primero contra segundo de la tabla, y 4-1 para lo nuestros. Vámonos!!!...llevamos 7 de 7, líderes invictos y del tirón a primera.

Me olvidé de los virus -que no de los cleenex- por un par de horas, y estuve muy presente, empujando y aconsejando a mis chicos. Vibrando, gritando, animando, serenando...gran partido, si señores.

Cerve en "la afición" con la familia extensa y para casa.

Un gran día, sin nada especial, o con todo...fácil, tranquilo, fluido...que rica la realidad, como la quiero.

Nada me moverá de acá, de mi mismo acá -y de mi mismo allá-, de este ritmo tranquilo y pacífico, se está tan agusto.

Las cosas claras y el chocolate espeso, que para sufrir o volverme loco quizás también me hice viejo, - o ya lo viví -, o aprendí a llevar esta vida y aceptarla, a no pensar, que buena recomendación dejarse llevar y saber vivir con lo que uno tiene.

No quiero confusión ahora, ni palabras que no llegan a ningún sitio, ni yo, yo, yo...o tu , tu, tu. Siento si a alguien le pesa esta fácil felicidad, no tiene por que pesarle a nadie. A mi me alegra la felicidad ajena.

Te convido a creerme cuando digo futuro...suena de nuevo, recordándo como la cantaba andando en la bici de Moi por el malecón a primera hora de la mañana, -sin documentos-, atravesando el viento.

viernes, 28 de noviembre de 2008

Canción de cuna para dos

Escucha la música pequeña
que lindas orejitas tienes
para escucharme mejor

Vibra de mi corazón al tuyo
sonríe con toda la dulzura
de nuestro enano mundo

Duérmete entre mis brazos
sonríes más tiernamente
mientras se cierran tus ojillos

Dormiremos juntines esta tarde
sabiendo que nada va a pasar
cuidándonos, todo nos abriga

Nos vamos a ese cielo azul
por un ratito eterno
que nos quedará siempre

Aguanto el justo ratín
para mirarte dormidita
y dormirme con tu carita

Soñaremos dulces, dulces sueños
nos calentará la misma agüilla salada
correremos los idénticos verdes

Y antes susurro en silencio
el último te quiero
de tu última sonrisa.

28/11/2008
A mi niña Laurita

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Belleza que pierde

Inmutable toujour
sin importar días
momentos
me pierdes siempre.

Ojos de corazón
recuerdo
tous les corps
absolutement
bellos y generosos
acariciados
y por siempre
acariciados.

Los que jamás rozaré
con mis dedos
que no con mi espíritu
y con mi sangre,
motivo de vida
la alegría necesaria
el placer constante...

Tu espalda curvada
y mis dos manos
y tus dos pechos
melena negra
que bien encaja todo

De lo mejor
que vino después
de la sincronía
de mi deseo
convertido
en tu cuerpo
sin pedir haciendo
mi obscena voluntad.

La niña rubia
gigante encima
de buen hacer
y mejor decir
para que no te olvides nunca
y nunca me olvidaré
quizás repetiré.

De la distancia reciente
del charco de mi esencia
en siempres síes
de sentirte al fín mujer
con hombre.

Motivos constantes
de salidas y entradas
al mundo cotidiano
conjunción
de los dos mundos.

Cuanta belleza
digna de alardes
derroche de fuerza

para el mejor amante
para el hombre deseado
para la que no está
para la que vendrá.

26/11/2008
A la certeza de la belleza

martes, 25 de noviembre de 2008

Martes de verdad terrena

Hoy suena un variado de música española -llevadera, popular, fácil de acompañar-.

Kika, no me abandones, ahora que me reconozco tanto mi blog no lo hace...;-)

Crema de calabaza con arroz integral. Gracias papi. Ayer, al llegar a casa, apareció en la nevera. Y una nota en la mesa: "Te dejo crema de calabaza en la nevera y pan de Olesa. Petons. Y otros 2 cigarritos."

Si yo no voy al oro líquido de la viejita, el oro líquido de la viejita viene a mi. Que bueno.

Y queda cerveza, voy por la segunda, en la copa que me regaló María de Alemanía. Sabía que la utilizaría, nos conocemos bien...este jueves cena...mañana te llamaré preciosa. Me apetece el japo de Provenza y birra en el Mediterraneo de Balmes...

La crema naranja está sublime, espesa, y el arroz le da un punto. Suena Loquillo: uhu, uhuu nena...voy a ser una rock and roll star...

Días de amigos, de los 3 más especiales en 4 días. Domingo tenis matinal con Lluís, muy divertido -broken orto papanatas-, y buena charla -más seria que de costumbre entre nosotros- .T'estimo tete.

Hoy todo el día con Xavi, hicimos un taller en la uni de Tarragona "mano a mano", que ni Silvio y el primo Luis. Qué gusto estar juntos, y que buena complementación tenemos. Te voy a echar de menos estas dos semanas en Malasia. Disfruta de esa formación tan rica -y después me la cuentas tomando cañas-y del reencuentro con tu hermano y su bici viajera.

Me alegra pensar que al final estará ahora abrazando a Elisa y que algo he tenido que ver.

Me quedo con la amistad siempre, incondicional, lo mejor del mundo. El amor es otra cosa, por debajo -no se te vaya a olvidar mi niño-.

Yo para ser feliz quiero un camión...hace pocos días Eva se la cantaba a Laurita y no paraba de reirse...como siempre. Mañana a ver que le canto a mi nena. Creo que Silvio no...algo más alegre mi niña, lo prometo.

Me pierdo. Se acaba la crema. Se pasa por la cabeza borrar toda esta entrada...¿lo haré?...cualquier noche los gatos de tu callejón, maullarán a gritos esta canción...

Yogur y galletas maría. Gran compra ayer: dos litronas y pack familiar de marías.

Y los cacharros okupando toda la cocina...¿vale que hasta me gusta verla así?....¿y que mañana la limpio?...¿y saco las botellas?...no se pierdan el próximo episodio de en la cocina con el trovador.

Y que rico el mail de Sonia...nena...com estic sempre?...i està plovent...i no sento com piques a la porta...

Si, volvió la lluvia para hacer más romántica mi despedida con Xavi. El sol ya nos iluminó todo el día.

Fijar por fín, el domingo el reencuentro con Pilar...ya tocaba morena de mis entretelas...

Pues sí, volví a salir al mundo, sigue ahí, como siempre...como yo.

Otro habitante de la encimera, una botella vacía, La matemática de la cerveza: 2 jarras alemanas de cerveza=1 botella vacía en la encimera. Estos alemanes están muy por delante nuestro. Eso me recuerda que tengo que quedar con Michael el próximo martes.

Cuando fuimos los mejores....

Que bién se me da la realidad, la tranquilidad, Xavi...tens raó.

Me quedo con la verdad de estrellas en el mundo de hoy, más fácil, pero no cambia nada, quizás no cambie nunca...paciencia y escalera mi niño.

lunes, 24 de noviembre de 2008

Verdad de estrellas

No me quedaré esta noche
con nada que no entienda
que no valga mi pena
y las estrellas
de esta tormenta eléctrica

por el cielo voy bien.

Me quedo con las estrellas
que bien entiendo
la última música
la de siempre.

Contigo no me quedo

pasó la ternura del sol
pasó todo

menos las estrellas.

La verdad de las estrellas
es mi verdad
el resto puede esperar
soy en la escalera.

Perdonar si ayer os pedía
lo que no me podéis dar.

Me queda mi poco
lo mucho me queda
me queda todo
mucho
me queda

La tierra que piso
con delicado cuidado
el cielo que abrazo
con el mismo cuidado.

¿Qué voy a hacerle yo?
si cualquier casa es mi casa
si cualquier cosa es mi cosa

No se fué mi estrella
me hice viejo para huir

25/11/2008
A mi estrella

domingo, 23 de noviembre de 2008

Silencio

Hoy no quiero palabras. Cierro los ojos, sale el humo. Siento el aire que entra y sale por mi nariz.

No hay mensaje en la botella. Ninguna playa, cine, amigas...el mundo quedó lejos.

Mi unicornio azul.

El día de la publicación de mis poesías del silencio, las mejores, la selección.

Se el motivo de la emoción que no llora. Mi derecho a hablar.

La verdad y el dolor -que no dejo doler-, duele en paz.

Silencio, más silencio, me voy cansando lentamente.

Cierro los ojos, espero...espero...espero, con solo un poco de desespero.

La esperanza espera mi niño. Tengo todo el tiempo del mundo, de todos los mundos.

El tiempo de ahora.

Y no necesito más tiempo, paciencia mi niño.

Ayuda técnica

Ya comenté en la primera entrada que la tecnología no es lo mío.

Ahora no se como hacer para que en la página principal pueda publicar directamente, es decir, que veo como cualquiera.

Mi blog no me reconoce, yo a él si...¿se ha enfadao conmigo?...

¿Despersonalización?...¿tengo que preocuparme?...¿Qué hacer para que vuelva a salir arriba a la derecha "personalización", "diseño"..."editar"...y el lapicerito de edición rápida...

Echarme un cable porfa, necesito recuperar mi propia identidad...

Besos

sábado, 22 de noviembre de 2008

El hijo de la novia

Siguen los días tranquilos, a veces demasiado, -ahora demasiado-, la melancolía se abre paso, muy sutil y elegántemente. Alfombra roja a la soledad. Es este momento, -aunque sonría-, aunque esté a gusto con Estrangeiro de Caetano, el vino barato, el chandal y las ganas de cama y paz. Hoy no cenaré.

De nuevo el calor escribiendo, me quito el chandal. No siento frío este otoño, escribo desnudo. Quizás busque el calor de la cama.

Le digo al bueno de Caetano que cante un poquito más bajito, por favor.

Días de amigos con mayúsculas, amigos de día, luminosos.

Jueves al fín con Marc, en el pueblo, con mi hermana y Laurita, mis padres, en familia. Vida tranquila y soleada, saludos, cerveza en la Torre Lluch, saludar a amigos, abrazar...de camino a casa. Que buena vida y que buena mañana, cuanta paz. Laurita dormida en el carrito. Mirándola por el espacio transparente desde arriba.

Viernes, al fín también, con Xavi, -no por viernes, por Xavi- por mi hermano. Hacía tiempo que no comíamos juntos, habían muchas ganas. Amigos de nuevo, después de aquel día tan duro y la siguiente, la de las palabras que duelen decir, oír, que cuestan salir...pero entre nosotros salen.

Palabras ciertas, amigo -mi mejor amigo-. Qué buena aquella comida en el japo de la fede, que providencial y que necesaria. Amistad de verdad, hasta dentro, profunda, amorosa, única.

T'estimo guapo. Ja saps que m'importa molt el que et passi.

Tus palabras me llegan a dónde nadie llega, a la verdad, a quién soy. Intento escribir como tu me dices: explotando. Tu deseo de explosión es más violento que el mío. Todo llegará, seguro. Ahora el corazón no explota, se abre, sonriendo.

Oígo niños por la calle, sonrío de nuevo. Me sirvo el resto del vino, en la misma copa sin lavar que acogío el Viña Pomal de la cena y la música italiana de los 60 con Marta. El Borsao de 2 euros me sabe casi tan rico ahora.

No es casual que no tenga T.V. Algunos sábados tarde la añoro..., y me voy a casa de los papis a apalancarme...mientras ellos están en la casa de la montaña del yayo con la cuadrilla, como casi todos los sábados.

El yayo Ramón también subió con el Sr. Rafael, a trabajar. Al bajar, después de comer, se descuidó las llaves en el restaurante. Me llamó papito (ya las recuperó) y vine ipsofacto a abrirle, -llevaba esperando en casa de la prima Elena solo 6 0 7 minutos me dijo-...y regresé a acabar de ver Regreso al futuro, me encanta la primera parte, es lindísimo ese encuentro con los papás de Marti, y la visión de lo azaroso -o no-, del presente en el futuro. Mc Fly, Mc Fly...¿hay alguien en casa McFly?...

Y en la dos, ¡milagro!...recién empezaba el hijo de la novia. Que grande es Campanella. Estuve en un tris de llamar a Marta para que la viese, hablamos de ella estos días... tienes que verla algún día mi niña.

No se cuantas veces la ví ya... La primera en el Bosque con Paola, de estreno. La segunda, dos días después -en el mismo cine- con mis padres. Después en dvd de alquiler...reposiciones...

Cada vez que la veo lloro más y mejor, lloro y río con intensidad, me emociono muchísimo, y va in crescendo.

Pasaron los años que no podía, que me prohibí llorar. Abres el grifo...y después no paras...

Los ojos de Norma (la novia), las palabras de Antonio Belvedere (genial Hector Alterio, a la altura de Norma Aleandro), el boludo con posibilidades de Rafa (Ricardo Darín), el amigo José Luís (actorazo, vi más pelis de él -acá se sale-, y en Luna de Avellaneda increible), Nati (Natalia Berbeque, -te amo con lucura linda-), y absolutamente quiero a todos los personajes, a la niña Victoria, a la ex. y a su gordo -Dick Watson-...¿Quién es Dick Watson?... al primo pelotudo, al cocinero Francescolli, a los lugares de BB.AA., a todas las escenas...sin excepción.

"Míralos, es como ver bailar a Fred Astaire, parece tan fácil"

"Quiero todos tus problemas, y los míos, esos problemas...el problema lo tiene quién no tiene esos problemas"....y el portero: "a mi el tipo me parece sincero"...y Nati arrollando a Rafa a besos...todo por la cámara del portero electrónico, en blanco y negro con ese brillo de esas cámaras y con ese sonido.

Los ojos de la novia viejita, los ojos de la viejita. Grande Norma, grande.

"Querés un polvorón"...y "Sí, te quiero viejito"

"Te creés que tenés el resto de tu vida memorizada"

"Por que yo valgo la pena, si..., sabés...yo valgo la pena"

Quiero que me quieran exáctamente igual que la viejita quiere al viejito, querer como Antonio quiere a Norma, el romanticismo..."Sabés, hoy hacés 35 años"...contar mis cumpleaños desde el primer día que estaremos juntos. Un nuevo 23 de septiembre.

Y como Nati quiere a Rafa.

Yo también quiero eso, ese siempre, y ese "y después también".

viernes, 21 de noviembre de 2008

La tendresa abriendo caminos

La tendresa (Lluis Llach)

La ternura

Este camino que dejo atrás es largo
pero muy ligero de su bagaje
de nada me valen tantos azares
ni los viejos caminos
ni la orilla del mar
si dentro suyo no siento como late
y late
el frágil arco de la ternura

De tu amor lo espero todo, y tanto...
que me hago un canto para el atardecer
Estimo el ansia de tus ojos
impudicarte tu cuerpo desnudo
pero amor te quiero más y siempre,
más y siempre...
sabiéndote esclavo de la ternura

Del dulce latido de la ternura
que espera
la ternura que exalta
la ternura que nos cura
cuando hace poco... la soledad.

Aiii, si no fuese por la ternura...

El mundo que vivo a menudo no lo siento mío
y se los porqués de una revolución
miseria y guerra, hambre y muerte
fascismo y odio, rabia y miedo...
rechazo un mundo que llora estas penas,
tanta pena...

pero de repente viene la ternura
aiii si no fuese por la ternura...
la ternura que espera
la ternura que exalta
la ternura que ama
cuando hace poco...la soledad.
pero de repente viene la...

la ternura que exalta
la ternura que ama
cuando hace poco...la soledad.

aiii si no fuese por la ternura.

jueves, 20 de noviembre de 2008

De la dulzura y de la tranquilidad

Es curioso. Muchas noches no tengo ganas de escribir, no se que decir...me pienso si ponerme o no, y misteriosamente -como sin querer- ya estoy en ello.

No se como empezar, las ideas diurnas parece que se olvidaron, pero empiezan a salir palabras a borbotones -como sale la sangre de algunas heridas-.

Cuando respiro y transpiro tanta tranquilidad, conecto con la dulzura, con mi parte más tierna, sonrío embobado, escribiendo solo, escuchando de nuevo a Caetano.

Es curioso. Deseo y amo mi paz, mi calma, pero tengo la necesidad de compartirla. Siento que la comparto quiera o no quiera.

Igual no es tan curiososo, estoy solo. Extraño. Y a la vez, no extraño. No extraño nada que me aleje de aquí.

Me siento todo lo bien que se puede sentir uno solo. Estoy bien, lo digo alto, claro y sin miedo. Ya aprendí a no engañarme con eso. No fué fácil.

Y cuando comparto mi vida física -mi presencia-, me gusta que sea igual que ahora. Me cansé de actuar. Pero a veces sale automático, viejos hábitos, ancestrales miedos...poco a poco mi niño.

Me encanta referirme a mi como mi niño. Y desde esos maravillosos días en Las Palmas con Irene, me sale el mi niña y mi niño, es tan dulce. Gracias mi niña. Te escribo para ver como anda la sal y la pimienta por Londres, tengo ganas de saber de vos.

Nada puede romper esa calma, será así -la vida y los sueños me lo dicen-, es lo que quiero, tengo y necesito. El mundo funciona mejor así.

Caetano se calló, y vuelven a sonar esas 22 canciones de bossanova que me regaló Nando desde Sevilla junto con las fotos de la India. Más dulzura. En el peto dos desafinados tambe bate un coraçao.

No, definitivamente, el viento no la hundirá.

Calor, siento calor, y como otras veces escribiendo, me desnudo.

No quiero -otra vez sin querer-, pero aparecen las mujeres de mi vida. Pasaron unos días desde tu huracán, y de nuevo la calma me hace verte con otros ojos, pero verte. Solo pienso en lo mejor para tí mi niña.

Son ojos tiernos que comprenden en silencio, que te desean bien, que se preocupan por tí, presiento que estás bien.

Noche de dulzura.

La tendresa sin tristeza. Escucharla, acá os la dejo, el català de Lluís Llach aquí no es frontera, es camino.

De no escribir la poesía más linda del mundo, pero sentirla sin necesidad de ponerle palabras.

Meterme en la cama con todo eso, fiel, fumarme el último piti y dejarme caer.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Me quedaré

Hay lugares de los que uno no puede marcharse. Las fugas son cosas del pasado. Uno es uno en cualquier lugar, de ahí es imposible largarse.

La vida llega a un punto que te coloca en tu sitio -aquí y ahora- las dudas desaparecen, o si más no, son cada día más pequeñitas. Todo nos ha conducido aquí, dónde estamos.

Si uno sabe quién es no hay marcha atrás. Se deja de jugar, y entonces los juegos se llevan mal. No quieres jugar con nadie. Que nadie juegue contigo. Quizás eso sea madurar, hacerse un hombre.

Aceptar tu destino -que no es fácil-, parece que nadie se contenta con lo que es. Y ese destino está en nuestras manos, aunque hayan cosas escritas. Somos libres, y esa es nuestra principal grandeza. Siempre hay un reducto para la libertad, la libertad de uno, ayudar a la libertad de los demás. La libertad interior.

Hay muchas personas que no lo consiguen, que andan perdidas, que no saben quién son.

Podemos andar toda la vida en ese camino, entre quienes somos y no sabemos. Y hay que querer recorrer, vivir, gozar y sufrir para saberlo, más allá de la teoría... que esa la sabemos todos. Tenemos que poner de nuestra parte.

El miedo nos atenaza, ahí está una de las claves, quizás la más importante. Hay que ser valiente y enfrentarse a uno mismo.

Y hay esperanza, ahora más que nunca, se siente alrededor.

Saber a que viniste a este lugar en este momento. Las reglas de juego están muy claras: todo funciona desde el amor, no hay nada más. Y esa palabra tan desgastada por el mal uso incluye respeto, comprensión y perdón. Palabras demasiado importantes.

Es difícil dar algo que no tienes, y perdonar por lo que no has tenido y no puedes dar. Ahora no puedes dar, mañana si quieres, quizás si. Todo cambia. La permanente impermanencia.

Siempre hay tiempo, no estamos condenados, el amor está en nuestras manos, somos libres de lo que hacemos con él, en conciencia, por la que hay que esforzarse tener. Hay mucho margen de actuación, decisiones y quizás más importante, redecisiones.

Y saber olvidar el pasado, no ignorarlo, pero olvidar aquello que lastra el camino, otra vez el miedo. Cerrar algunas cosas para que puedan entrar otras. El futuro está ya aquí, ya llegó, anda esperando en el presente, pero ya llegó.

Así que aquí me quedo.

Abierto, sin miedo, sintiendo cada minuto y cada segundo, cada día más. Buscando luz y captando toda la que pueda de dónde pueda, hay luces en cualquier lugar.

Más de una mano
en lo oscuro me conforta
y más de un paso
siento marchar conmigo
pero si no tuviera
no importa
se que hay muertos
que alumbran los caminos.

La vergüenza
Silvio Rodriguez

El sol necesita al día para serlo, siempre está ahí, aunque no lo veamos.

Dejarse llevar, dejarse ir para estar, notar como la vida fluye y fluimos con ella, sin teorías...sentirlo, sin pensar casi nada o nada, la cabeza siempre nos traiciona, bloquea, convence...más miedo.

Siento vivir sin miedo, o con el justo animal.

Me quedo.

Espera sana que no cruza los brazos, que tampoco lucha, -no quiere luchar, o llamarlo de otra manera- que pide poco o casi nada -que no es lo mismo, pero es igual-, otra vez Silvio iluminando.

Necesitaba hoy reinvindicarme.

Me quedo.

martes, 18 de noviembre de 2008

Música italiana de los 60

Alguien dijo que ya no se hacen canciones como estas. Y es completamente cierto.

Recordé el CD que me envió Lilliana desde l'Umbria, y como cantábamos il mondo y otras delicias aquella soleada mañana de Mayo del 2004, tomando capuccinos en el bar del centro de alto rendimiento.

Esa música con sapore di sale sonaba muy bien cenando a la luz de las velas estos días, mientras estabas en la cama y yo preparaba la cena y me servía la primera copa del Viña Pomal, y bailando a oscuras en la cocina.

Hoy volvió la paz, el silencio del viento, pasó el huracán y no hay que lamentar daños. La vida vuelve a ser tranquila, la ansiada calma que presiento me acompañará en el camino -no puede ser de otra manera- el viento no la hundirá. El necesario descanso y distancia. El aire para respirar.

Me quedaré en el calor de mi cala en noviembre, en el de mi ancha playa y el agua fría en tu cuerpo. Con la comida y la paz de Les agulles, sin cristales rotos. Con muchas imágenes de belleza salvaje que aquí no puedo reflejar.

Con lo más importante, con la ayuda, con el cemento roto y el que queda por romper. Otras cosas se irán rápido, pero esas no. Quizás se queden para siempre, como las cosas buenas, las que ayudan a caminar, a seguir cantando y derrochando vida.

El descanso del pacifista. Volver a casa a comer, Laurita me echó de menos, -se lo noté nada más abrir la puerta y mirarnos-...aunque Eva diga que las niñas con esa edad no echan de menos (no te creas todo lo que hemos estudiado)...que rico volver a verla reír -esa risa es capaz de hacerte olvidar todo y ser feliz- , tenerla en brazos. Cada día está más zalamera. Tomando el pecho se soltaba, me buscaba con la mirada, y reía picarona. Y la colifror gratinada con bechamel y jamón, y el conejo en salsa, eso si que es comida de verdad.

Santa siesta. Aina corriendo hacia mí en el parque en cuanto me vió, me vuelve loco cuando hace eso, y la levanto todo lo que puedo, la abrazo a horcajadas y me da besitos. Después me regaló un dibujito de un señor con gafas y un helado. Y Laurita con esa chaqueta de lana blanca tan linda y con esa capucha que parece un duendecillo del bosque.

La meditación de la tarde, hacía semanas que no meditaba y lo necesitaba, otra vez esas vibraciones, una intensa electricidad en las manos nada más comenzar, el incienso empapando otros olores. Tengo que volver a meditar a diario, el retiro queda ya muy cerca y tengo que preparar mi cuerpo. Hay ganas de volver.

Solo hay presente -como siempre- y Cesárea Evora de nuevo sonando. Y se acabó la última cerveza.

Queda la música...

Queda lo bueno.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Breve reseña de una linda matinal.

Vienes con la luna casi llena y con la tímida lluvia que empezó en la mañana, fresca y con energía.

Qué linda mañana. Que bueno volver a acostarse a una hora decente, y que el dolor de cabeza se marchase, ayer no impidió, pero incomodó toda la tarde. Tarde de limpieza, que ya tocaba mi niño. Ahora es un gusto ver toda la casita reluciente, la verdad. El olor a limpio se mezcla con el incienso y el tabaco. Ahora las manchas que en días pasaban inadvertidas, duelen.

Mañana de visitas, de mis padres, del vecino de arriba, de mi prima Elena -la vecina de enfrente-, Fina -la vecina de al lado-, de mi hermanita Eva y mi niña Laura, que no quería dormir esta mañana.

Ayer después de comer intenté dormirla susurrandola canciones de Silvio, le gustan... -las está descubriendo de bien niña-, pero al final se durmió en brazos de la mejor mami del mundo mundial. Que rico tu comentario, que tuyo..., y que bueno que me leas, y nuestros códigos..., podríamos decirnos muchas cosas y nadie captaría ese argot tan familiar.

Le dí a leer a mi mamá el mensaje de los 5 de noviembre ya no pesan, le gustó leerlo, ella no se conecta vía internet, - ella tiene otra conexión - y me sigue riñendo lindamente, cuando me voy a dormir tarde, tomo demasiada cerveza, tengo la casa desordenada...y esas pequeñas cosas que la convierten en mi mamá, Montserrat -Montse-, con nombre de montaña mágica y vocación de bruja buena.

Hace un rato, salimos de compras con esas dos bellezas. Me gusta pensar que la gente puede pensar que Laurita es mi hija y mi hermana mi mujer, desde fuera, parecemos un feliz matrimonio. Espero que tengamos muchas más mañanas de estas, que bien sientan. Tienen la culpa de que no me esmere en buscar trabajo por las mañanas.. -ahora son todas mías-, y tienen un precio elevado. Unos euros de más no vendrían mal, claro, a nadie...pero...mi tiempo es mi vida, ponerle una cifra no es fácil, soy de letras. Me rijo por otros valores en esa ocupación matinal.

Fruta y carne, compras para dos casas. Eva no dejó que pagase yo la ronda de frutas. Ya no cabe nada en la nevera, que me dice gracias por llenar mi vida. Me olvidé comprar cebollas. Nunca le pongo a las ensaladas, pero un sofrito sin ellas no se puede llamar tal. No podré decir aquello de contigo pan y cebolla, te diré contigo pan, queso y vino.

Estas mañanas por el pueblo son tan plácidas. Es un gusto la tranquilidad que ser respira a todas horas por el barrio. Me abro una cerveza y le vuelvo a dar al play, Caetano de momento parece que no se cansa de cantarme. Se arranca por Bellesa pura.

Espero la perdida de Marta para acercarme al aeropuerto. Es un placer tener compañía por unos días, diferente, emocionante...

Las mañanas y las noches dejan salir a distintos animales, cada uno tiene sus preferencias. Es la primera vez que escribo acá por la mañana. Cada día que pasa me convierte más en un animal diurno, que le gusta la luz y guiarse por los ciclos solares, funciono mejor. Pero la lechuza de Minerva levanta el vuelo al atardecer...

Ahora, me siento bien, quién no se sentiría.

Gracias a todos los que leéis, y a los que dejáis comentarios, que si que sabéis lo me gustan, valoro y agradezco. Podéis aprovechar el anonimato...y soltar lo que os pida el alma. Este invento sin seguidores pierde bastante gracia.

Gracias incondicionales a las inconcodicionales.

lunes, 10 de noviembre de 2008

Hay mujeres

Ya cené. Ligero, pan con queso suave y pavo. Antaño devoraba siempre, con pasión, rápido...con ansiedad, como queriendo llenar un espacio que no se llena comiendo. Ahora saboreo, me entretengo, como menos, necesito comer menos, escucho al cuerpo e intento hacerle caso.

La nevera, ahora repleta, no me seduce esta noche. Esta mañana sí -ayer se estrellaban palomas- cuando fue colmada, que alegría verla llena. Hacía tiempo que no hacía compra grande. Me permití algún capricho, un viña pomal del 2001, un tarro de mostaza Maille a l'ancienne, una tableta de chocolate Lindt de 80% cacao, para los cafés...y el resto de cabeza a la marca blanca con nombre de terrateniente brasileiro. Es un gusto pasearse por todos los lineales del súper, con calma, mirando los precios, comparando, leyendo las etiquetas, mirando a las señoras que compran...hice una compra bastante sana, y cerveza no faltará en unos días.

Ante tal derroche (jamás me gasté tanto), me acordé, como siempre, de la gente que no puede hacerlo. Mundo injusto y mentiroso. Soñemos juntos con uno mejor, para poder construirlo. Como me dijo Ana, mi maestra, nosotros por hacerlo no nos tenemos que sentir mal, podemos contribuir a aumentar la cuota global de felicidad.

En algunos momentos de mi vida, me sentí culpable de ser feliz, de estar bien, pensando que era injusto habiendo tantos y tantos que no lo estaban. No me podía sentir feliz pensando en otros que no lo eran. Suerte de Ana, cuanto iluminó.

Os confieso sus palabras en nuestro ritual de despedida:

- Gracias Ana
- Gracias a ti
- Te quiero...(entre lágrimas)
- Sigue derrochando vida
- (la miré profundo)
- Y que la vida te de...

Nunca olvidaré esas dos frases, y sus lágrimas, nuestras lágrimas. Por suerte el ritual era de cierre de la formación, nos volveremos a ver...nos seguiremos dando.

Mañana iré a por fruta y verdura fresca. Y carne y pescado para congelar. Que buenos los principios de mes, y recuperar algo de solvencia de nuevo.

También quiero que Marta no se muera de hambre...llega el miércoles y se quedará hasta el lunes. Me apetece mucho que venga y conocernos mejor, es una linda y curiosa historia que en otro momento quizás contaré, los caminos del GR-11 son inexcrutables Playeras verdes. Qué bueno que vengas.

Pensaba en la tarde, de camino al club, en el comentario de P.v., como siempre, los mejores comentarios. Me agradan los de ánimo, los aduladores...claro...pero me quedo sin duda con estos, con los que tocan la fibra y dan en el clavo.

En unos de esos momentos de pensar en la soledad, empieza a sonar en la radio "No one" de Alicia Keys, y miro a mi derecha y en una furgoneta leo: "Trasportes Soledad". De nuevo, todo encaja.

Después con los chicos genial, que lindos son, y que bien la paso -y encima me pagan para que llene la nevera-, hasta cuando me pongo serio. Gracias peques, cada día os quiero más.

Ahora en esta noche casi no suena el viento, silba dulces y tranquilas canciones, hay que parar el oído para escucharlas.

Sonaba hace poco el "Nuevas mezclas" del último de la fila, y ese ¿Quién eres tú?...que me transporta...si la encuentro por ahí os la dejaré en la canción del día. Ahora suena Caetano Veloso, solo interrumpido recién por el ruido de la lata de cerveza -valenciana con nombre alemán- y su peculiar y refrescante sonido.

Otra forma de soledad la siento en la falta de inspiración, en el aburrimiento, en la falta de alegría. A esta paz le falta guarnición. O comprarme una tele para las noches, vaya vd. a saber...

La soledad también entendida como lo que necesitas de los demás y no tienes, lo que viene y esperas recibir de afuera -el correlato de lo que das- para enseñarte lo que no sabes, lo que no ves, o para confirmar lo que llevas muy adentro - mejor ambas-, va más allá de unimimismo.

Las mujeres y la alegría en armonía, en sabia receta.

Os entiendo tan bien, tengo esa polaridad bien trabajada. La sensible, de la intuición, la sensibilidad. Siempre anduve con mujeres, mi hermanita, estudié con mujeres, trabajé muchos años rodeado de mujeres, en la universidad, en el hospital, en el master...

Fue un gusto ir recuperando esa parte tan importate de mí, la más auténtica que fui olvidando. En estos 3 años de tanto crecimiento, tanto camino y tantas cosas, y que volvieron aquel verano -escandalosamente- en la India. Ha sido tan placentero volver a recuperarla, a recuperarme, a rescatarme de aquel hombre que era otro y que también te amo. Gracias mi niña por dejarme y dejarme volver a ser.

Esa polaridad es la que me conecta tan bien con las mujeres, la misma me hace atractivo y atrayente para mujeres con polaridad masculina. Con Xavi lo hemos hablado muchas veces, él es igual en ese aspecto y muy diferente en otros (felicita a Elisa de mi parte, que hoy es su cumple, te perdono las cerves de los lunes). Siempre me dice: eres el único tío al que llamo.

Y a mi me gustan las mujeres muy cariñosas, muy femeninas, que les gusta ser mujer hasta el final -para lo bueno y para lo malo-con esas manos largas y delicadas que te agarran el alma a través del cuerpo, sensibles, intuitivas, silenciosas, calientes, osadas y valientes con sus osadas dudas, coquetas como las niñas naturales y con poco maquillaje, que se tocan el pelo cuando disimulando saben que las miras, y que miran bien a los ojos, y te dicen "te quiero" y -se quién eres-, te conozco...en miradas que invitan, que te hacen soñar..., ¡sonreir!..., inocentes, transparentes, morbosas y viciosas -todo junto-, con las palabras justas, en silencio que lo comprende todo, y que se sienten comprendidas, sin jugar, sabiendo que sabes lo que quieren sin que lo digan...todo eso y mucho más es lo femenino.

Algunas de estas mujeres se vuelven locas por los hombres así como muy machos -y como muy cobardes por dentro-, que las hacen sufrir -que no las entienden- y que después nos lo cuentan a hombres como Xavi y como yo, que os deseamos con mucha más pasión que ellos...podemos ser amigos simplesmente...reza una bossanova por ahí. Que l'hi farem.

Hay mujeres veneno, mujeres imán, hay mujeres de fuego...y helado metal, hay mujeres consuelo, mujeres fatal, que bien sonaba en directo la canción del niño Joaquinito en la nasal voz de Sisa, en ese doble directo en, pongamos que hablo, de Madrid (Antoñito Flores, que bueno serás siempre coño). Ese tesoro de vinilo algo rallado - y viceversa-. Y hay locuras de dos, de diosa y de dios...del cubano grande.

Y yo te espero, esta y otras vidas, no me importa, se que estás escrita. Y te digo, esperando, ven, ven ya...que yo espero a que se crucen nuestras miradas, estaré atento lo juro, callado lo juro, hablando en silencio. Acércate sin miedo, yo te quiero, soy yo.

E pao, e pedra, e o fin do caminho...e un gesto de poco, un poco soasinho...una promesa de vida en el teu coraçao.

E melhor ser alegre que ser triste
alegria es a melhor cosa que existe
es asin como a lus do coraçao...

Mais pra facer una samba con bellesa
e preciso un bocado du tristesa,
sino no si fais a samba ben...



domingo, 9 de noviembre de 2008

Domingos sin sirena

Este domingo por la tarde es uno de aquellos en los que cuesta un poco navegar. Mi pequeña barquita no sale a la mar, y el alma puede manejarse con las olas, no hay vendaval. Mar quieto tu cuerpo de paisaje eterno.

El naufragio en esta cala, -mi linda cala-, me hizo olvidar al marinero que me trajo acá. La barca echó raíces en la arena - barquito de tierra - mientras la reparaba. Aquella jamás vista tempestad la dejó mal. Este marino no es lobo, sino 7 gatos de mar. Suerte del viejito que la construyó, sus huesos son fuertes y la pude recuperar. Barca nueva de alma vieja y viejo mar.

Pesqué en la cala de mamá una pequeña merluza, que cociné en la hoguerita -que ahora me calienta- con patatas y sal. Me lié un cigarrito después de cenar, confundiendo al horizonte con su efímero fumar.

Ese mismo humo, me trae recuerdos de marino, de novias en cada puerto, de alas, de miedo y de mar.

De aquella playa que nos quedó para siempre y que no puedo olvidar. De arenas fugaces e inolvidabes. Dulces y cálidos lugares en donde atracar.

Y las sirenas no cantan. Me quedo sentado y desnudo escuchando la música azul de la mar, escuchando a mi pesar.




La noche que sueña que te quiere soñar

Entre las estrellas y el alba
entre velas desveladas
te quiero soñar
Que el pibe a la merienda
Que el fajador a la contienda
te quiero soñar

La sed al oasis real
la boca el pito después de amar
te quiero soñar

Las olas a la barca reparada
la marea a la ballena varada
te quiero soñar

Como camarón el agua
como el nano a les paraules
te quiero soñar
A la noche el furtivo
a la fuga el cautivo
te quiero soñar
La peya a la escuela
el timón el capitán
te quiero soñar
La mano a la mano
la mar a la mar
te quiero soñar
Primavera a golondrina
el grito a la morfina
te quiero soñar
África al pan
Cuba a la libertad
te quiero soñar
El desierto al maná
despertar a tu mirar
te quiero soñar
La señal del perdido
el recuerdo del olvido
te quiero soñar
La noche que sueña
que te quiere soñar
te quiero soñar
9/11/2008

Sábados noche

En la misma copa inapropiada de ayer, en los mismos brindis, me sirvo el resto del brut real. Hoy no celebro nada. No tengo ganas de cotidianedad. Os dejé en el piso de abajo la poesía que ayer mencionaba. Mantuve su título original que pretendió y pretende prescinbilidad, como nosotros.

La poesía no recibe comentarios. Las profecías siempre cuestan más. Quizás seré poeta cuando sean anuncios. Quizás los sean ya algunas. En alguna por ahí escribí y los profetas callan borrachos cambiando boca por oreja.

Ahora el silencio dice cosas tristes, se animó a hablar. Y Silvio -que sigue sonando- no tiene la culpa, mea culpa. Os dejé en "la canción del día" Canción de Navidad. Fue mi canción elegida para una fiesta que nunca llegó. Para una guitarrista que tampoco llegó.

Me seducen terriblemente las mujeres que tocan la guitarra y las que andan en bicicleta. Y las piernas enfundadas en pantalones tejanos con botas altas. Los vestidos blancos de verano solo con piel debajo. Y los andares de la garota de Ipanema, y de las cubanas -por allá todas las mujeres no se olvidaron de caminar como mujer-, hipnóticas en ese erótico baibén, en esas divinas nalgas en las que mis pupilas se clavan y mis manos no alcanzan.

Aún recuerdo las de Salomé por el malecón. Aún no se si el acierto. Aún recuerdo mirar a tan bella criatura mientras dormía. Y te miraba y bailabas...esa mirada sutil provocaba tanto calor. No te me vas de la cabeza, de todas las cabezas.

Y vuelve la necesidad de repasarme dónde estoy. Lo dijo el cubano mientras pensaba en Cuba.

El calor. El frío sin frío. Sonia, encajada, de pie, de nuevo mojados, en el vestuario. Hacer el amor de pie y acabarlo de rodillas. Me tengo que desnudar, me aprieta la ropa.

Me la quito toda. Que poco apetece meterse solo en la cama. Para eso solo hay el amor.

Pedacito de papel al viento...

Para que no se me olvide la letra, voy a anotarla en tu piel
Se que jamás perderé esa libreta, se que la conservaré.
Pero despacio, no eres común
luego será más lento...
aún
una palabra
otra después
hasta que aprenda
lo que no se

Letra de piel
Silvio Rodriguez Domínguez


Como tiernas babosas
de la campiña
ella y él se enrroscaron
humedamente...
humedamente.

Y el dejó de ser hombre
como ella niña
para ser uno solo
completamente...
completamente.

Desde todos los puntos
que los juntaban
se saborearon tanto
y con tal delicia
que las horas de vida
que les quedaban
decidieron pasarlas
en la caricia...

A menos de un supiro
del tibio abrazo
el resto de la historia
se debatía
en otomos
galaxias
y otros acasos
que encontraron certeza
justo aquel día
que encontraron certeza
justo aquel día.

Y se hicieron leyenda
los dos amantes
enrroscados eterna
y humedamente...
y humedamente.

Nada pudo tocarlos
detrás de guante
solo pueden saberlo
los igualmente...
los igualmente...
los igualmente.

Leyenda de los dos amantes
Silvio Rodriguez Domínguez










Soledad

Ni papelillo brillante de regalo
ni guante blanco de antiguo ladrón,
ojos verdes y abiertos en lágrimas y lucidez
sin exigencias, sin prisa, sin final.

Paz dulce en los días de sol,
mi miedo de mayor cuando llueve.

Ya aprendí de ti, bruja maestra
tarareo tu canción sonriendo,
con la boca pequeña...
a paso lento y tragos largos.

Cuídate pequeña de mi, tengo la receta
lo sabes,
para que no te vayas nunca.

La vida vale más que tu
y sin ti no vale nada.

Espejito y juez de caminos
que siempre andaremos de la mano
sin delirios sin condena sin perdón
sin ventana azul
sin mi...
¡más presente que nunca!
sin ti...
sin un nosotros que no necesito
por unívoco y escrito destino.

Con todo mirando al suelo
con todo mirando al cielo,
sin límites el mar abierto.

Perderte es olvidarme
perderse es encontrarte.

Estás más allá de mi, tan amarradita
que solo te encuentro fuera de mi.
Ni te adoro engreída ni eres íntima
te quiero compartir
sin poder dejar de hacerlo

No te quiero solo en compañía

pero no te separes mi niña
que los pobres necesitamos tu verdad
cuando no la vemos.

Tu silencio para escucharme
para escuchar
para vivir.

Infechada, debía correr o andar o pararse el 2006
Revisada el 9/11/2008


"No la quiero más, la quiero desde hace más tiempo"

sábado, 8 de noviembre de 2008

Y se llama felicidad

Me gusta ponerle título a las entradas. El de esta noche tiene que ser especial. Tiene que ser capaz de sintetizar todo lo bueno que voy a escribir. Todo lo bueno de mi vida. Hay tanto, siento tanto, que no se por dónde empezar.

Empecemos por dónde hay que empezar, por el presente, por la realidad, por el ahora. Acabo de desvirgar, con el consabido ritual que requiere, a la habitante más vieja y constante de la nevera: una botella de cava, brut real, Heredat Mas Tinell. Una delicatessen. Y ya fluye en mi paladar, en una copa alta de vino, no tengo copas de cava, la vida no es perfecta. Este cava sí, este momento.

Recuerdo que se la pedí a mi padre para una noche que tenía que ser especial y que no lo fue, no como yo esperaba. Esas cosas que guardas para momentos especiales...que decir de esas cosas que no sepáis. Y ahora lo es.

Andaréis intrigados...¿qué pasó mi niño?...cuéntanos...cuéntanos anda...

Pasó mi vida. Nada más, siento decepcionaros...emociones fuertes, buscadlas en otra canción...(Rebajas de Enero, que decía el niño Joaquín). La misma canción que tenía que cantar con el insurgente y andaba fuera de repertorio, justamente en Enero...y que me devolvío al nº 7.

Pasó mi vida, la que me brota de las manos ahora y os quiero cantar.

Entro en detalles. Hace no tanto, lo llevaba francamente peor con ella, con mi compañera más fiel, alborotadora y rebelde. Ahora es pequeñita y linda, tierna y cariñosa -como a mi me gustan las mujeres-. Y no molesta, es silenciosa. Me deja vivir en la paz que quiero vivir.

¿Su nombre?...¿no lo sabéis ya?

Y se llama Soledad. Otra vez el niño echándome un capote.

Brindo por ella, con brut, como en las grandes ocasiones, y le dedico un poema de hace también un tiempo, ya empezábamos a entendernos sin querer entendernos.

Ayer cené con María, mi niña de los grandes abrazos y los besos imposibles, mi amiga. El destino -o el resto de amigos que no vinieron- convirtió el afortunadamente poco distante reencuentro en una cena para dos, y los dos intuímos que así sería. Le puse palabras a sus sentimientos, que eran los propios. Habitamos un ciclo común. Que miradas más cercanas y cómplices, como siempre con mi dulce niña María. T'estimo. Gràcies per trucar sempre. Y por compartir brindis.

Feliz regreso a casa, zappeando con la radio del carro, sonriendo, y mirando por la Avenida Diagonal a una luna que me absorbía por completo. Estaba enorme y muy baja, en su justa mitad, luna de una mitad, luna solitaria, inclinada levemente hacia la izquierda formando una gran cuna de luz.

(
Y las "casualidades" de la vida. En la tarde -que dirían por Chile- , llegaba al club puntual, -como siempre-, aparcando el coche, sonaba en la radio "It's time to change, es tiempo de cambiar", de Juanes. Tres horas y pico más tarde, arranco el coche, y volvía a sonar la misma canción. Y hasta aquí puedo leer, tarjetita para el público...

Pensé también llegando al club, lo agradable que es pasar por dos colegios a esa hora, ese ruido divino de pibes despavoridos, ese movimiento y devenir encantador de nenes y mamás, algún papá, abueletes entrañables, alegres pasos de cebra, guardias urbanos simpáticos y del poble, y sonrientes miradas a todos los niños que alcanzo a mirar - y alguna mamá que otra, que también me sonríen-.
)

Aterrizo con mi plateada nave en la capital (tengo mucha suerte con los aterrizajes en la ciudad, que no es fácil como sabrán los urbanitas (dícese de los habitantes del planeta Urbano). Camino por lo que fueron mis barrios, paso por esa calle que me cobijó, también sin trafico, -como ahora en este barrio-, levanto en tradición la cabeza hacía el segundo piso, y me cercioro del buen estado de los 3 ficus que regaba cantándoles por Silvio...doblo la esquina y delante de la puerta del restaurante dónde ya me esperaba María...me cruzo con la inventora de los 5 de noviembre.

Y no fuí yo quién propuso barrio o restaurante. De hecho yo quería conocer el indio del que me habló María hace poco, la misma noche que planificamos esta cena del Fromm.

Me creeréis si sabía que la iba a ver. Y bueno, después de cumplir una intuición más, cordialidad, dos besos, las preguntas de rigor, la familia bien..."entra y tómate una cerve" y el sabido y consabido no puedo... y nada más, apenas, nada más (esa canción -de alguna manera-que el nano consiguió que jamás sonase igual de bien en su autor, el primo Luis Eduardo).

"Bueno si...este mes no puedo...ya nos llamamos y quedamos con calma". Ya puedo esperar sentado. Hay cosas que no cambian, como me decía Xavi. Es cierto, siempre llamé yo (no le daba tiempo a hacerlo a ella, mea culpa).

No María, no; mi niña dulce, cap problema, gracias por preguntar. 3 5 de noviembre son suficientes.

Y ayer noche debería estar cansado, fue la primera noche que no escribí por acá. Contesté a unos lindos mensajes (¿dije ya como me gusta recibirlos?), ya era muy tarde, y me fui a la cama. Dentro, me acordé de generosas amantes del pasado, pero no conseguí abrazar a Morfeo. Al final me levanté, hambriento, me preparé una ensalada de arroz integral, brotes de soja y atún, seguí fumando...volví a la cama con el estómago tranquilo y dormí muy muy poco.

Razón de más para estar ahora cansado...pues va a ser que no. Mañana no madrugo, tengo la mañana libre.

La mañana de ayer si que madrugué. Me corté el pelo, otra vez corto, esta vez no me convenció Ricardo, mi fiel cortapelos. Y si mamá, tetita...tenéis razón, el espejo no miente, estoy más guapo. El yeti de la foto de el piso de arriba se quedó sin pelos, espero que no sin fuerza. Siempre que me corto el pelo, que lo hago no más de 4 o 5 veces al año, me acuerdo de Insurreción -me corto el pelo una y otra vez, me quiero defender- Otra joya del último de la fila que conservo en vinilo como oro en paño.

Me sentí tan bien hoy. A media mañana y sin tanto pelo, 3ª y última sesión de clase con los chicos del ciclo formativo de Jordi. Después de ese trabajo que sale fácil, agradable y bien pagado, me fui a comer con Bily.

Bilal -el niño Bily para los amigos- merece que os lo presente. Es mi pupilo desde que tenía 13 años, y justo hoy, 8 de noviembre, cumple 19 años. Justo hace un año, lo celebrábamos con unas Quilmes de medio litro en Mar del Plata, lejos de casa...y también celebramos el mío juntos, y no tan lejos de casa, en Génova. Mucha historia juntos. Soy bastante más que su entrenador..., amigo, hermano mayor, papá... (el suyo falleció hace 3 años). Es una relación muy especial, lo quiero mucho, es como mi hijo adoptivo, así lo defino muchas veces cuando hablo de él. A veces hasta me recuerda el bofetón que me pidió a gritos que le diese y le dí, y que yo parece que olvidé...

Ahora está hecho todo un tío, y puedo decir, sin temor a equivocarme, que nuestro contacto y relación (no solo conmigo) a través del deporte le cambió la vida. Ahora es ya una realidad, y hasta los que hace años me previnieron y dudaron...ahora no pueden negar la evidencia. Te quiero mi niño.

Qué gusto verle bien y compartirlo con calma comiendo en esa terraza, aunque sea noviembre.

Después vino la imagen más linda del día, me quedé absorto, esa foto sin cámara se me quedará por tiempo. Los viernes me llevo a correr media hora, por caminos de tierra, a los chicos. Ya de regreso al club, 18:05, casi sin luz, en un lindo atardecer que las nubes adornaban sin impedir, Montserrat a mi derecha, majestuosa y mágica montaña -catalana por excelencia- de perfiles abruptos y roca desgarrada en místicas y enigmáticas protuberanias, arropando a los chicos delante mío corriendo por esa subida. Se detuvo el tiempo, y eso que estábamos corriendo. No es fácil imaginarla con palabras y sin aquella luz.

Y lo mejor estaba por llegar. Miro el móbil y me doy cuenta que tenía dos llamadas perdidas. La primera del viejito. Lo llamo y me encarga traerle al abuelo unas tijeras de podar. Mañana saldrá muy temprano para la casa del campo con el Sr. Rafael. Ya se las dejé en la escalera.

La segunda perdida, de Nuri. La llamo y me dice: vente a las 10...

- A la diez, ¿que pasa?
- Jorge Drexler.
- Coño!, me encanta!!!...gracias Nuri!!!
-Nos vemos después

Pues eso, concierto, otro al lado de mi casita, a dos minutos andando, y con invitación, gloria bendita. Seguía en el club y en alto digo: a veces la vida es maravillosa.

Antes paso por casa de los papis, a buscar la tijeras para el yayo Ramón. De paso, observo la reacción de mi madre ante el corte de pelo...lo ves hijo, ¿si es que estás más guapo o no? Sonreímos los dos.

-Le decía a tu hermana si te lo habrías cortado o no...

Aprovecho la coyuntura -que siempre son de aprovechar- y me preparo un pequeño bocadillo de jamón dulce y queso. Me habían preparado cena, no sabían lo del concierto. ¿Te quieres llevar un poco de crema?...el oro líquido de la viejita.

- Vale!!!...y como la otra vez, sacó el tupper grande con la crema y otro más chico. Y como la otra vez el chico se quedó vacío...hay que dosificar con tiento el abuso. Pocas veces me llevo nada, pero ese oro verde me apasiona. Hablando del papa de Roma...me voy a calentar el resto...

Apuro cual buscador de oro americano el alargado tupper con la cuchara, lo chupo hasta donde alcanza mi lengua, chupo la tapa, el oro va caro. Ahora suena el microondas, ruidoso y tarda en calentar...los baratos es lo que tienen. Me encanta muy caliente -como a mi me gustan las mujeres-.

Agarro el bol verde con un trapo y aquí lo tengo, al lado del ordenador, a mi siniestra, por donde entra ese perfume de campo.

Me pierdo en la crema de calabacín...¿por dónde andaba?

Andaba de camino pa la casa cavilando lo que soy y lo que siento...

Fugaz escapada por casa y llego a ese espacio, el mismo de acróbatas, ese impulsor festival de la primera entrada. Anteriormente, comentaba esta noche, era un cine de esos que ya no queda ninguno, de doble sesión los domingos, de butacas de madera y tela verde, del hueco del que salía la luz del proyector con su característico ruido de fondo. Cinema Paradiso.

Nuri estaba en la puerta, trabaja allí. Abrazo, besos, gracias y entramos: "viene conmigo..."

- Están Vanessa y Ruben.
- ¡Que bueno!

Vemos a Vanessa. Que buena compañía. Ruben no estaba, andaba en el vecino pueblo en un asado en casa de Lucas. Qué ricos esos asados a la argentina, con calor, no con fuego... como hacemos acá.

Me siento al lado de Vanessa. Nos hemos conocido más por los blogs en dos semanas que cara a cara..., pero nos hemos conocido y sabemos que estamos cerca.

El de al sur de Montevideo encantador, cálido, cercano, dulce, tierno. Todo su repertorio respondía a peticiones del público, en constante interacción y entregado, a esa guitarra y vos.

Genial, sutil, tranquilizador, simpático, complaciente Jorge Drexler.

Se acabó la magia de la BUENA música, y saliendo de la sala, volvió a pasar ese milagro de la comunión en la expresión de las sonrisas del respetable. Como cuando sales del cine después de ver una buena historia. Felicidad que bonito nombre tienes, sabio Lichis.

- ¿Te apetece una cerveza?...preguntó el trovador errante.
- Sí, respondío la acróbata sin acrobacias.

Dos cruzcampo -con brindis en la segunda- por barba en tranquila y empática charla. Qué buen momento. Y hablando de Lara, Vanessa me prestará sus libros que religiosamente devoraré con pasión y devolveré. Y colgaré el póster del festival acróbatas en un lugar que pueda ver desde la mesa de mi arrinconado despachito.

Y se llama soledad.

A esta dulce rutina quién la podría odiar. No será un texto brillante, pero es un texto feliz, una vida feliz, que se queda con la cerveza de todos los días antes que con el cava de las ocasiones especiales.

P.d.: Me entró un hambre canina, y a esta igual intempestiva como cualquier otra hora, batí en el mismo bol verde del oro, dos huevos con sal y pimienta, que ahora degusto por encima de una torrada de pan de pagès del pueblo de la casa del yayo.


miércoles, 5 de noviembre de 2008

Los 5 de noviembre ya no pesan

Leo que por Madrid también dejan sonar al viento. Es libre y está al alcance de todos los bolsillos. Que bueno saber que otros también lo escuchan. Ayer noche en mi tranquilo barrio era silencioso. A veces sientes y no le pones palabras, sin afán de ponerlas, pero ninguna encaja, sientes sin motivo, y te dejas llevar de nuevo...por ese silencio del sentimiento sin nombre.

El alma en calma no necesita palabras, pero hasta que no inventemos otro lenguaje, también somos palabras. Yo solo lo inventaré para tí.

No pesa el 3er 5 de noviembre. En el primero regresaba a nuestra casa con un pack de 6 estrellas y después de pasar la ITV del coche, tan tranquilo, era viernes -casi ni viernes-.

Y desde el infierno, se abrió una trampilla a mis pies. ¿Te acordarás tu de los 5 de noviembre?. No lo se, creo que no. Casi mejor. Nos quedaremos con el 23 de septiembre, con todos. Y sonreiremos cuando nos recordemos, de la mano de otra persona.

Gracias por los comentarios, por todos, no sabéis, o si..., como los agradezco. El insugente de P.v. en especial por su clarividencia. Algún día de estos Vd. y yo nos tomaremos unas cervezas después del concierto. Prometo volver a acompañarles con mi voz, pero esta vez si quiero una canción alegre y sin números. Gracias por las palabras y la valentía.

Escribo y me entra calor, me desnudo -para el frío siempre está la bata a cuadros-. Qué placer desnudarse, vocación irremediable, añoranza indígena. Y que bueno haber pasado antes de llegar a casa por el OpenCor y comprar un litro. Y que no falten cigarros, esa guerra la ganaré algún día, de momento, con gusto, guerrilla y trinchera. Escribiendo no paro de fumar. Y pareciera que estoy enamorado: Como poco, bebo mucho, que cantaba Eros Ramazzoti. Puede ser...enamorao de la via, aunque a veces duela.

Al final el yayo recuperó el bastón del galgo anacarado del bisabuelo Pablo, lo había descuidado en la casa, no en el restaurante. Hoy estuve un rato hablando con él, mejor dicho, escuchándo (los abuelos se olvidaron de escuchar, hasta el oido nos falla con la edad y debe ser por algo). Y también debe ser por eso mi buena onda con los niños y la gente joven.

El yayo Ramón es de "la quinta del biberón", de los mozos que empalmaron guerra civil con mili. Al acabar la guerra, 3 añitos del ala -de estas alas, a la postre- en Zaragoza, en el cuartel del Castillo, al lado del Ebro. Un amiguete y paisano suyo, del delta del Ebro, estaba "de escriviente" al servicio del coronel José Palacios Palacios, que buscaba un asistente, y recomendó al abuelo. Como brillan sus ojos cuando me explica otra vez esa historia, y se rie como un niño.

Acompañaba a los hijos a la escuela, llevaba el correo, hacía recados de ese tipo...cuando iban de compras llevaba los bultos. Recuerda el miedo de la primera vez que habló con el Coronel, y que le preguntó si tenía ropa de paisano y ante la negativa, le dió permiso para volver a Campredó una semana. También le dió permiso para la siega del arroz, no debía ser mala gente Don José, como le pidió que le llamara, sin el Coronel por delante.

El Coronel Palacios fue compañero de estudios de Franco, y estuvo a punto de ser degradado por el mismísimo caudillo, ese que murío el mismo día que atropellaron a Teddy (algún mal pensado podría decir que ese día murieron dos perros, pero no sería justo para Teddy, además mi loco perrillo callejero tardó bastante menos de mil años en morirse) al dejar a parte de su división rezagada y recibir una fuerte acometida de los rojos.

¿Y quién servía en la misma casa?. Mi abuela, que entonces no sabía que iba a ser mi abuela. Como muy poco desde ahí empieza mi gusto por las cocinillas, era la cocinera. Y la moza más lista de Cabolafuente, a la única que propusieron continuar con los estudios en Zaragoza, pero no pudo ser. Pero la inteligencia no la dan los estudios.

Por aquellos años, debía rondar el 40, el yayo festejaba con una tocaya suya, la Ramona, que no hacía honor a su popular canción, dice que era muy alta y muy buena chica, pero que era igual por la espalda que por delante.

No se si esas poderosas razones u otras le condujeron a la joven e inteligente cocinera del Coronel, Doña Higinia (después se cambió el nombre por Ángela, la yaya Angelita), la dulce y la de contagiosa risa yaya Angelita. Esos eran ojos y no los de Bette Davis.

Cuando mi abuelo llegó a Cabolafuente, los mozos del pueblo le cantaron esta jota:

Ramón eres catalán
y eres persona decente
y has venido a buscar novia
al pueblo de Cabolafuente.

Y ya que andamos con batallitas del abuelo, no quiero dejar de mencionar a mi bisabuela, la yaya María, madre adoptiva del yayo Ramón, que se quedó huerfanito de muy chico. Era la curandera del pueblo, y la gente acudía a ella para que le pusiera las manos encima. Era una mujer adorable, más de la tierra que un arao. Y me decía xiquet. Y en su casa a la vega del Ebro, me hice amigo de su perro, que estaba atado todo el día y no era amigo de nadie. Espero conservar algo en mis venas de esa sanadora entrañable, de curtida piel y de un espeso cabello blanco.

La primavera pasada acompañé al yayo a pasar un día con su familia a tierras del Ebro. También buscamos infructuosamente a otro primo por El Canalet de Jesús i Maria, el abuelo, cargadito de inocencia infatigable, le iba preguntando a la gente y les explicaba la historia: Si que era...y se casó...y se fueron a vivir...

Familía de campo, ahora abandonado, de nou jornals de extensión a la misma orilla del Ebro. Que pena da ver ahora esa misma tierra yerma, y que se abandone el campo, -y que nosotros paguemos los tomates a precio de langostino-. Esos mismos nou jornals rebosaron frutales y todo tipo de hortalizas. Ahora nadie los quiere cuidar. La fantasía me lleva allá, siempre la fantasía, cada día más real, me lleva al campo.

Ahora el marido de su sobrina tiene una granja muy grande, la próxima visita no me la pierdo, aunque me dan pena los mismos cerdos y reses que después devoro. Suerte que las plantas no tienen ojos. En la comida en casa del Emilio "Milio" y la Natalia todo lo que comimos era de la casa, todo. Habían matado recientemente a una res, y a unos tomates, lechugas, cebollas...y los canelones eran de vicio. Y después estofado...la comida fue más abundante que en Navidad.

No me olvido de los ojos de la Natalieta, que linda joven y que ojazos azules. Ese desparpajo y energía de las jóvenes me seduce sin remedio. Qué lindos 23 abriles. Y que forma de mirarnos.

Volvamos al siglo pasado...y se vinieron a Gavà, a la casa alquilada de la calle Mayor, la misma donde nació mi madre. Después se compraron la casa (Nota para los jóvenes: antes se podían comprar casas) del callejón sin salida detrás del Maragall. Ahora vivo en esa misma casa, en lo que fue recientemente su cochera, y antaño la pequeña tienda de ropa, y más canosamente aún, morada de tres familias de alquiler (en la parte del fondo, aún perduran los cambios de suelo), y con esta pinga ya en danza, el taller de mi padre (Aún sigue siéndolo detrás de las cortinas).

Que buenas raíces siento, las terrenales y las aéreas.

Y que ricas son las batallitas de los abuelos. No las cambio por toda la historia de España de Pierre Vilar, es curioso que los franceses hayan escrito y documentado las mejores historias de España, o no, vete a saber.

Si señores y señoras, damas y caballeros, el yayo Ramón.

Celebro y vuelvo a brindar solo (ya dije que soy fiel a mis tradiciones), levantado mi último vaso de cerveza y apuntando al piso de arriba, por él, el último yayo que me queda: ¡que dios te permita llegar a los 100, los mismos que pienso vivir yo!

Como me gusta ser su vecino de abajo. Y que nos llamemos "vecino" a voces, y al subir a su casa, picar la puerta de madera y gritar: iiiieeeeepppeeeeeeee!!!!!!. Fijaros si es sabio que hasta reconoció las plantas del amor...y me dijo: esto es para fumar, es ilegal, te las arrancaré. El destino, demasiado calor y un transplante tardío le pusieron manos al yayo, a mi yayo Ramón.


Y hablando de familia, os voy a dejar una foto de una de mis familias, la acaba de enviar Anna. De algunos de los presentes en la foto ya os he hablado, podéis ver a Mi niña Laura, a la niña de mis ojos Aina, a Eva - la que me despierta y nos invita a solomillos -, de su niño Robert, de Ru, del andorrano que me hizo la foto de la portada, de Ester (que se fueron antes y no salen, los cuatro)...y el trovador errante que con sus amigos se siente menos errante.



Carta urgente

Ese mismo viento, hoy se lleva las palabras, no cualesquiera, las de bien adentro.

Ya es 5 de noviembre. Feliz aniversario mi niña de grandes ojos acogedores.


Hay cosas que te escribo en cartas para no decirlas
Hay cosas que escribo en canciones para repetirlas
Hay cosas que están en mi alma y quedarán contigo cuando me haya ido
En todas acabo diciendo cuanto te he querido.

Hay cosas que escribo en la cama
Hay cosas que escribo en el aire
Hay cosas que siendo tan mías, que no son de nadie
Hay cosas que escribo contigo
Y hay cosas que sin ti no valen
Hay cosas, y cosas, que acaban llegando tan tarde.

Hay cosas que se lleva el tiempo sabe dios a donde
Hay cosas que siguen ancladas cuando el tiempo corre
Hay cosas que están en el alma y quedarán conmigo cuando me haya ido
En todas acabo sabiendo cuanto me has querido.

Hay cosas que escribo en la cama
Hay cosas que escribo en el aire
Hay cosas que siendo tan mías, que no son de nadie
Hay cosas que escribo contigo
Y hay cosas que sin ti no valen
Hay cosas, y cosas que acaban llegando tan tarde
Hay cartas urgentes que llegan
cuando ya no hay nadie

Rosana Arbelo

Gracias enana por la canción, propicia a más, y que te vaya muy bonito de verdad.

martes, 4 de noviembre de 2008

Los lunes al sol

Escribo en silencio. A veces dejo que entre alguien. Cesárea Evora siempre es buena y triste compañía. A veces la música no deja al silencio que suene, y la apago, como si de pensamiento se tratase.

A veces no me resisto al viaje, querencia a dejarse llevar. La última visión iluminó mi vocación de veleta, el viento no me hará mal, ese sueño me lo dijo.

El mismo viento que trae las respuestas con la brisa que ahora quiere ser torbellino, pero me sigo dejando llevar...con los ojos cerrados y con el sabio trueque de pensar por sentir...cada vez cuesta menos...me dejo arrastrar...sin miedo mi niño, sin miedo, tu estrella no te abandona, lo sabes.

Pero la luna en creciente me tienta a rezarle en silencio, no a la llena y jinetera, la de los versos sordos y los amores de estrella en esas noches con ventana, que lindos versos jamás escribí.

A veces, se escapan algunas palabras: "ven".

La trabajada paz, la ternura, mi sueño más viejo y mi destino...los siento sin pensar en todo lo que me está llevando hacia mañana...paciencia mi niño, paciencia.

PARA vivir no quiero
islas, palacios, torres.
¡Qué alegría más alta:
vivir en los pronombres!

Quítate ya los trajes,
la señas, los retratos;
yo no te quiero así,
disfrazada de otra,
hija siempre de algo.
Te quiero pura, libre,
irreductible: tú.
Sé que cuando te llame
entre todas las gentes
del mundo,
sólo tú serás tú.
Y cuando me preguntes
quién es el que llama,
el que te quiere suya,
enterraré los nombres,
los rótulos, la historia.
Iré rompiendo todo
lo que encima me echaron
desde antes de nacer.
Y vuelto ya al anónimo
eterno del desnudo,
de la piedra, del mundo,
te diré:
"Yo te quiero, soy yo".

La voz a ti debida
Pedro salinas

domingo, 2 de noviembre de 2008

Domingos por a tarde

En la calle hace viento y fresco ya. Mi padre me explicaba paseando a Luna la diferencia entre aire y viento, él es de ciencias. En casa hace calor, o yo tengo calor, me tuve que arrancar la bata de cuadros, desnudo se escribe mejor. Me regalé para esta tarde algunos vasos, no demasiados, de buen rioja. Después de la borrachera de anoche, de sábado de 24 horas, toca volver a la realidad.

A esa sin llamadas y sin planes, sin esos mails, sin comentarios, y con fiebre de escribir. Hoy no vino Boris. Gracias a dios, una mujer demoró su visita. Me voy a servir otro vaso de vino, a su salud, lo levanto y brindo por él. Tengo esa costumbre, brindo solo.

Ayer fue día de campeonato, de madrugar mucho, de responsabilidad, de furgo, de risas, de polideportivo, de disfrutar de la familia más extensa que tengo, de muchos saludos. Y noche de soltar todo y largarse, haciendo honor al título del blog y a Silvio que sigue sonando.

Ya volví, toca volver siempre. Me hizo salir de la cama Eva, aunque ya perreaba sin mirar el reloj, pero con la intención de decirle "sí, vengo a comer". Siempre que puedo, respeto las tradiciones, mis tradiciones.

Los domingos son de paella de mamá. Siempre los espero como bálsamo. Otro placer del otoño es volver a darle al agua bien caliente en la ducha, y sentirla, cantando Tu frialdad, hoy también se la susurré a Laurita. A esta niña le gusta que la cante.

Subo a avisar al yayo, está preocupado, ayer perdió el bastón del bisabuelo Pablo (el abuelo de mi papá), aquel con la cabeza nacarada de un galgo. Recordé su lamento infantil cuando un negro 20 de noviembre (coincidencias de la vida), atropellaron a Teddy mientras lo paseaba. Brindo por mi pequeño amigo, aquel loco perrillo de la calle, que me llevé entre lágrimas con una manta de cuadros roja a enterrarlo en Olesa, en casa del abuelo -y por la oración que le dediqué fumándome una nube ante su pequeña tumba rodeada de piedras blancas-.

Parece ser que el bastón cambió después de muchos años de familia. Espero que a su nueva familia de acogida les haga bien, aunque quizás no hubiese estado mal devolverlo. El yayo Ramón, subiendo las escaleras del parking, me decía: "si me hiciese falta de verdad, no lo habría olvidado".

Hoy no había paella, mi hermanita nos regaló unos solomillos. Y mira vos, que ayer, mi mamá y yo tuvimos la misma apetencia visionaria: "solomillo", fue divertido compartirlo al llegar en la cocina. Siempre abro todas las ollas en cuanto llego. El mío era al roquefort, pero la vida no es perfecta. Una excesivamente suave salsa de manchego hizo las veces. Hay cosas que nunca se comparten, como mi receta de la salsa roquefort.

Esa mesa de domingo es entrañable. Me siento bien estando todos cerca y que nuestros pies disten tan poco los unos de los otros. De Luna y su linda carita entre el codo de mi abuelo y la mesa, encajada en mirada suplicante (nadie sabe poner mejor que los perros esos ojillos). De Aina y su evolución en la mesa -se ponga dónde se ponga siempre está en el centro -, y de Laurita en el Baby Born que le regalé (-amos) a Aina reclamando monerías cada vez más dulcemente ruidosa. Y mira, debe ser noviembre, pero también recuerdo -asaltándome sutilmente-, cuando ella estaba en la misma mesa.

Y los domingos por la tarde se empieza pensar en lunes, en facturas pendientes de cobro, en trabajo, en la realidad muy real que siempre me decía Mari Pili en el Vedado. Cuba se merece otra entrada, Ruben, no dejéis de escaparos cuando podáis. Yo hice un viaje de esos que decías sin pulserita. Y ya que estamos, quiero un Romper a Rompar regalado y dedicado.

Y me llevé el oro líquido de la vieja, la crema de calabacín. Desde dentro de la nevera me está llamando. Los boles verdes temblequetean ansiosos en la pica. Ya les escuché y requetecalenté la crema que hace juego con el bol.

Extraño respuestas los fines de semana. Y un mail de Gaby, de la capi, de Stefania, de Eva, de Sonia, de que Lara se siente en su escritorio, de Marta sin peros, de Ire que me dice que viene a verme, de los amores del Fromm -o también véase la cena del viernes próximo, que Gemma llegue a casa con Nil y nos lo cuente, del cine pendiente con Arantxa...-y hasta extraño extrañarte.

Anoche fuí poeta, pero que sería del poeta sin prosa.

El azar me devuelve tu nombre

El azar me devuelve tu nombre
algún dios bueno me regala
tu presencia

un pequeño diablo me habla
mientras sonríes

Oigo llamadas en la ventana azul

te toco hasta casi alcanzarte
con mis manos

te siento con los ojos del dolor
cerrados

te espero y vuelvo a la ventana azul

el viaje más puro me lleva
a tu cuerpo
de suaves rincones oscuros

ríos de esperanza rodean mi casa

esta noche te encontraré
en mi cama
y haré un ritual sagrado
para que estés en mi sueño

lo mejor seguro pasará
por mi ventana

en ella canto alto tu nombre
invocando a una nube

pero la noche sigue cayendo
y el azul es aún más intenso

tus ojos siguen blancos
como la espuma contínua

el caos confunde a lo bello
con tu alma

todos los ciclos confluyen
en tu vientre

todo lo bueno se muere
en tu espalda

lo pequeño y lo breve
difuminan mi alegría

se me cae la nada encima
se me mueren los días

regresa pequeña que el azul termina

olvida tu mundo
entiérralo en mi pecho

ocupa el espacio
como lo hace el aire

perdámoslo todo en tu cuerpo
de ventana azul

oigo tu llanto
a lo lejos
en la ventana azul

17/12/1996

Vuelve a la noche sin lágrimas

Vuelve a la noche sin lágrimas
el poder sordo de la oración paciente
demanda a gritos
no quiero ser feliz

Vuelve a la noche llorada
y permanece
toda la vida

Nada sin llanto tiene sentido
hoy lo demás es mentira

Vuelve al día sin día
una amistad consoladora
regresa un frío que abriga
mantas para corazones
conscientes en todo su calor
la necesidad

Vuelves a la noche sin lágrimas

26/4/1997

Agua sin besar silencio

Me quieres sin decirme nada
espero en sentimientos comunes
de arritmia solitaria
de luz que no ciega
en hogueras de agua
sin besar silencio

11/3/1996

Yo también me enamoré

Yo también me enamoré de tu música azul
marina, viajera y húmeda
y aún hoy vivo
en ella sin tí
en ella...
en ella en breve

triste salió el sol de mentira
no el de sus ojos
deslumbrante melancolía
de recuerdo caliente
con luna sin estrellas
que con sol y verdad
volveré a enamorar

22/2/1996

Amor de ningún momento

La llamada contínua no fuerza respuesta
la ofrenda infinita llora en indiferencia
conserva tu pura e inteligente soberbia
frágil al tiempo confía con los ojos abiertos

los quiero ver cerrados para iluminarme
ese color sagrado que nada separa

No quiero volver al se que perderé
pierdo si actúo
pierdo si callo
pierdo si lloro
siempre pierdo

No volverá la llamada contínua a molestarte
aunque te bese
amor de breves momentos

otra vez entrado el día de los pies clavados
en vacío sin magia
amor de ningún momento

22/2/1996

Quiero estar a tu lado

Quiero estar a tu lado
y no te veo
ahora no te veo
pero te puedo sentir
ver tu sonrisa
saber que estás bien

poco trecho
en días contados
días sin fín
solo días

siempre tu
orgullosa
con miedo
siempre

Mañana debe ser el principio de todo
principio de todo quiero estar a tu lado

22/2/1996

Esclavo de tu contacto

Ladrón te robo miradas
y te miro
te beso
y siempre sin luz
buscaré tu boca

Tendré tu luz tan cerca
que cegará
apagado corazón

te tendré tan dentro
que explotará

seguiré cazando
tu mirada limpia
sintiendo tu presencia
deseo más
de lo que siento

Sin antifaz
te robo miradas
escondido
mientras duermes

vuela tu tesoro
hacia un amor perpetuo
en la soledad que aprendió
a amar en sueño

Te beso
siempre buscaré tu beso

entregado dulce
robado con pasión
cómplice sin buscar
acogido sin llamar

esclavo de tu contacto
mi caudal te busca
y siempre buscará
tu boca
en la oscuridad

27/2/1996

Borracho de poesía

Me emborraché de poesía
de café
de manzanilla con anís
y poleo menta con miel.

Me emborraché de lluvia
que no cesa

Me emborraché de noche
y de domingo.

Te amé poesía mía
como te pude amar a ti
pero amé.

De poesías viejas
para recordarme

De poesías nuevas
inbuscadas
sin vocación nacieron
regando el tiempo

De prosa que sola
se transfiguró sin sentido
automática
libre
alma de poeta

Con frenesí
con ansía
sin poder parar
volviendo a tí una y otra vez
para amarte

quiero volver hasta desfallecer
en tus brazos.

2/11/2008
A la noche borracha



Prosa vil de la vida
sucia eficacia
que los sueños te borren
locos y libres

(Manolo García-García Pérez)

Tan cerca pero sin ojos

Ya estamos otra vez tan cerca pero sin ojos
amándonos sin manos, quizás sin saberlo, amándonos

Huyamos del resto del mundo de cuerpos de ruidos

Solo dos corazones de ritmo viviendo y muriendo
sintiéndonos uno y perdidos
sin separar jamás la extenuación divina
esencia de seres misteriosos y cercanos
dormidos, engañados, escondidos

jugando al mismo juego
movidos al sacrificio de entregar
en cuerpo por el alma

Desnudos e irracionales
ya estamos otra vez

26/2/1996 (Rev. abril del 1997)

Nada era luna ayer

Nada era luna ayer
completa de sordo vacío

Lo perfecto y la maravilla
la alegría húmeda
del sueño no vivido

dimensiones excepcionales
se pierden
en la insignificancia de todo

Rezando por lo mejor
imploré otra vez amor eterno

Cansado de ver lágrimas y derrotas
vuelves a mi pie
zapatillas ligeras y verdes
obligan a caminar

Dios baja la cabeza
cuando pasas y le miras
para verte marchar
y sonreir satisfecho

La total sincronía entre nosotros
la justicia aburrida
sola y esférica calla.

Eres mi latido dormido en un mundo superior

Mi esfuerzo en tu felicidad
no se interpone

la medida perfecta es un segundo olvidado
instantes quietos invalorables
en tu dulce balance
el dolor más iracional
en tu espera incluso piensa

Eres mi único deseo para todas las vidas

la corazón de seguir
caminos sin final

La muerte del detesto
en silencio vocal libre

Mar habladora para atentas estrellas

2/3/1997

Breve luz en tu mirada

Mágicas y olvidadas flechas
fríos recuerdos
desgana de un tiempo
que demasiado siento

Hoy volverán a sentir
volverá la espera final

Hoy vuelves a mi lado

y

te oigo
¡te veo!
no hablo

no vivo sin tenerte dentro
preso cada sentimiento

Cada lluvia
cada alegría
fantasía

Fantasía que no cubre
el vació de tu ausencia
fantasía que no sacia
breve luz en tu mirada

sugestiva proyectiva
haces funcionar mis alas

Fantasía que se cansa
en la realidad soñada
de la unión de nuestros cuerpos
universo adentro

Lilas se que miento
que no llegaré a tu puerto
que no tendremos encuentro
solo tengo este cuento

Fantasía que no cubre
el vacío de tu ausencia
fantasía que no sacia
breve luz en tu mirada

sugestiva proyectiva
que hace funcionar mis alas

o demasiado alto
me mata

diciembre del 1995 (rev. el 25/4/1997)

Aprender que tus ojos son azul y no el cielo

El segundo más puro
sucio espejo casi bello
ignora todas las estrellas
cuando con tus ojos sueña

Eterno agradecimiento
a la hermosura superior
que me regaló contemplarte

Aprender que tus ojos son azul
y no el cielo

Que no inventó destino
ningún color sino el oro
ni piel tan fuerte
ni tan riachuela

que sin tiempo infértil poro
no inundé en sudor
de lazos muertos presentes
tan profundos como frágiles
en ilusión y risa

Hoy quiero enterrar compasivo
al asesino orgullo
dique de cascada futura en alegría
sonora primavera pasada
que arrodilla sumisa
recuerdo que impide
(que impidió)

seguir abriendo
aquel regalo de pureza encarnada
esbelta de cuerpo inquieto...

que engreído fervor
sabe que recuerdas
sabio despecho conoce equívoco

inrrecorrido camino
sabe que volveré a pisar

11/4/1997

Quiero amarte con otras palabras

Quiero amarte con otras palabras
inventar otro vuelo para tu mirada
caminar sin conocer el camino...
que tu corazón marque mi destino

En declaración de amor perfecta
semblante a aquel sueño volátil
donde solo ternura y tu imagen habitan
espacios etéreos de cósmica eternidad
tangibles a manos que no te faltan
me anticipo a deseos que pides callada
entre pícara y casta
adivino lugares a los que mi mano viaja

¡Jamás un silencio pudo hablar tan claro!
¡Jamás este niño pudo ser más niño!

que entre tus brazos
amor
esta noche
dormido

18/11/96

Al besar tu espalda

Nueva y alegre de suerte encontrada
en tierra firme de pasos veloces
en vida fugaz buscando verdades
rozando tu cuerpo de noche estrellada

Ni mar, ni cielo, ni playa, desencantada...
sin corazón amar en reto imposible
renunciar a ser sólo queriendo sentirte
enredada a mi vientre, encallada

Trabajar tu cuerpo sin pedir tu alma
arrancarte las flores sin poder salvarlas
abrir la ventana para probar tus alas

Ser frío como el silencio que no llama
cruel como el amante que escapa
sin preocupar ya mirarte a la cara

sin llorar por deseos que mi boca
alcanza al besar tu espalda

18/11/1996

No quisieron las alas

No quisieron las alas adelantar su locura
anidando en el frío de tu hermosura

ni supieron las flores abrigar tu pie
en otoños azules de mi cálida red
al saber de amores huye el pez

en pequeños mares lancé mi simiente
sin preguntar ¿será suficiente?
eras de piedra sin soles y torpes

Camino de casa paso por tu huerto
sembrando pupilas que mueren al viento
sin tocar tu cuerpo este es su lamento

Importuno de vida raíces que siento
en la tierra muda y sin sentimiento
perdido en destino que ahora no entiendo
alfombra de cadáveres se alejan muriendo

igual que cobardes y negras esconden
algodones grises blancuras de madre
que acogen sin hoyos rutina al dolor
cobijando en sus mieles sinrazón amor

25/10/1996

Barquito de tierra

Barquito de tierra en un mar de flores
susurros flotando en calladas pasiones
enredo en los pétalos de mis amores
con miedo a robarles todos sus colores

Manto azulado que envuelve soñando
bellezas sin nombre de cabellos dorados
con manos de música los cuerpos tocando
entre corazones mudos como fríos lagos

Luz en los ojos que rezan llorando
emociones eternas son dulce letargo
praderas de fuego llenas de labios
apagan un eco de gemido ingrávido

¡Puertos de estrellas al naúfrago ciego!
calor de verano en todo mi cielo
inundados sueños de oxígeno amor
en suspiros profundos melancólica voz

22/10/1996

Hoy no quiero amarte

Hoy no quiero amarte
cerrojo impaciente
en llave escondida

Confundido en tu dolor
recuerdo la calidad esencial...
dar cobijo

Vacío de tu beso soñado

No pisaré la playa prohibida
solitaria en camino pequeño

Cansado al caminar
piso las únicas huellas...
con alas

Tierra, del cielo prometido

25/4/1997

Lluvía a secas

Un regalo para la tierra
se hace realidad,
preconizado por un sabio

Me gusta que llueva
solo llueve afuera
las gotas caen del cielo,
no caen de mí.

Lluvía a secas
sin metáforas

Será que me gustan los extremos
los que se tocan
los que no hacen
buena pareja.

"Me tomaría otro café"
le dijo él a nadie
y ni él mismo se contestó.

No quiero dormir contigo,
no esta noche
se preguntó
o me pregunta

¿Adónde quieres ir?
No le dijo nada,
pero la entendí.

Al cabo de un rato
me contestó

Quiero qué leas
dentro de mí

No hay música.
No hay noche
No hay cama.
Y te siento,
estás

me entiendes a tu manera
perféctamente.

Te conozco.
No me olvido
de lo que me dices
sin esperar oírlo.

Tecleo sin dedos
en un silencio
sin tinta

2/11/2008
A esta lluvia vacía